María Doris Hernández Ochoa
2010-09-11•Política
La torcida mentalidad de algunos mexicanos les envía malignas señales de cómo hacerse de bienes de manera ilícita, mediante hábiles maniobras, alterando documentos o evadiendo obligaciones. Son los llamados delincuentes de cuello almidonado o de fino traje y corbata, que llevan magníficas relaciones con quienes detentan el poder de decisión para hacerlos cómplices, generalmente, sin dejar huellas... ni persona alguna que trate de encontrarlas por un convenio no escrito de dejar hacer y dejar pasar.