lunes, 21 de mayo de 2012

Carlos Romero Deschamps El hombre que recibe de Pemex $50 mil por hora

Desde que era chalán de Joaquín Hernández Galicia, alias La Quina, la vida de Carlos Romero Deschamps ha mejorado en forma apreciable. Hoy es el líder del sindicato de trabajadores petroleros, maneja a su antojo los destinos del gremio y una cantidad enorme de dinero: en su chequera del sindicato Pemex ha transferido cifras imaginadas pero nunca antes conocidas sino hasta ahora: mil 408 millones de pesos. 876 millones de pesos en cuotas sindicales cuyo destino nadie conoce. A un ritmo ininterrumpido de $49 mil 800. Y sólo hablamos de 2005 a 2007. Nada mal para un contador público de 64 años que gusta de viajar a Las Vegas, usar reloj de oro y navegar en su yate El indomable. Nada mal.
Por Fátima Monterrosa
Ilustración: Leticia Barradas

emeequis Página: 26 - No.123

Carlos Romero Deschamps es un hombre afortunado. No es que el líder del sindicato de trabajadores petroleros tenga buena estrella con los juegos de azar y de apuestas en los lujosos casinos de Las Vegas a los que asiste con cierta frecuencia.
Su fortuna tiene que ver, en realidad, con el hecho de que Petróleos Mexicanos (Pemex) le entrega un promedio de 49 mil 800 pesos por hora sólo para gastos de viaje, “apoyo económico” y cuotas sindicales. Y así ha sido, todos los días, durante al menos dos años y medio.
Un reporte de Pemex, entregado con base en la Ley de Acceso a la Información Pública, revela cifras hasta ahora imaginadas, pero nunca conocidas de manera oficial:

La dirigencia nacional encabezada por Romero Deschamps ha recibido de enero de 2005 a julio de 2007 una cifra que rebasa la imaginación de la gran mayoría de trabajadores petroleros: más de mil 408 millones de pesos.
En ese mismo periodo ha acumulado en el banco un monto de cuotas sindicales que hasta ahora no se conocía: 876 millones pesos de aportaciones de los trabajadores cuyo destino nadie conoce.
Una operación aritmética sencilla coloca las cosas en una perspectiva más entendible: cada día el sindicato dominado por este tamaulipeco recibe en sus cuentas bancarias una cantidad superior a un millón 513 mil pesos.
Y para viajes, comidas y hospedajes en hoteles de cinco estrellas como los de las cadenas Meliá y Sheraton, por ejemplo, Romero Deschamps cuenta con 204 mil pesos diarios entregados por la empresa paraestatal.
Los recursos que recibe por concepto de cuotas sindicales, préstamos, apoyos económicos, viáticos, fiestas y celebraciones lo convirtieron en el líder sindical que mayores recursos recibe en México y en América Latina.
Y de esas cantidades, este hombre de calva en su esplendor, de profesión contador y nacido en Tampico hace 64 años, no rinde cuentas a nadie. La ley no obliga aún a los sindicatos a que digan en qué se gastan los recursos de sus agremiados.
Acceder desde hace tantos años a ese vendaval de dinero cambia a cualquiera. Romero Deschamps no es hoy en absoluto lo que era antes. No queda nada de aquel abonero que vendía ropa y calzado de casa en casa en Tampico. Ni del joven chofer que cargaba el portafolios al otrora poderoso dirigente petrolero, Joaquín Hernández Galicia, La Quina.
Hoy, Romero Deschamps es un hombre millonario, quien tiene debilidad por usar relojes  caros y comprar yates de lujo que cuestan millones de dólares.
El salario que cobra mensualmente como trabajador de Pemex no le alcanzaría para pagar el reloj Audemars Piguet, de oro de 18 kilates que usa cuando va apostar a Las Vegas. Tampoco sería suficiente para comprar el yate de 1.5 millones de dólares y el lujoso departamento que posee en Residencial del Mar, una exclusiva zona de Cancún.
Romero Deschamps, quien recientemente firmó una alianza política-laboral con la maestra Elba Esther Gordillo, tiene además una historia marcada por denuncias de traición y corrupción.
En los 15 años que lleva al frente del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM), ha acumulado una docena de denuncias penales ante la PGR por corrupción y abuso de poder, pero ninguna ha prosperado.

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Romero Deschamps ha desbancado a la maestra Elba Esther Gordillo, la dirigente del magisterio, en el escenario sindical mexicano.
Pemex ha transferido al líder del sindicato petrolero la cantidad de mil 408 millones de pesos en 31 meses, entre enero del 2005 y julio del 2007.
En los dos últimos años del gobierno de Vicente Fox y los primeros siete meses del de Felipe Calderón, ha recibido en promedio una bolsa de 545 millones de pesos anuales por concepto de cuotas sindicales, préstamos, gastos de viajes y apoyos económicos al Comité Ejecutivo Nacional del sindicato.
Veamos los números desglosados.
En 2005 las transferencias al sindicato incluyeron, entre otros, los siguientes conceptos:
Cuotas sindicales (308 millones de pesos)
Gastos de viajes del Comité Ejecutivo (18 millones)
Apoyo económico al Comité Ejecutivo (28 millones)
Préstamos (49 millones de pesos)
En 2006 las transferencias cubrieron los siguientes rubros:
Cuotas sindicales (354 millonesde pesos)
Gastos de viajes del Comité Ejecutivo (20 millones)
Apoyo económico al Comité Ejecutivo (69 millones)
Préstamos (35 millones)
Gastos para los festejos de la expropiación petrolera (13 millones)
Gastos para los festejos del desfile del 1 de mayo (23 millones)
Gastos derivados de la revisión del contrato colectivo (84 millones de pesos)
En 2007 (enero-julio) algunas de las transferencias fueron así:
Cuotas sindicales (213 millones de pesos)
Gastos de viajes del Comité Ejecutivo (12 millones)
Apoyo económico al Comité Ejecutivo (41 millones)
Préstamos (825 mil pesos)
Gastos para los festejos de la expropiación petrolera (13 millones)
Gastos para los festejos del desfile del 1 de mayo (26 millones)
Gastos derivados de la revisión del contrato colectivo (88 millones de pesos)
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Estas cifras revela el poderío económico que posee el dirigente petrolero, quien logró el respaldo del PRI, PAN y PVEM para no ser desaforado como diputado federal y enfrentar a la justicia por el desvío de 500 millones de pesos de recursos del sindicato a la campaña presidencial del PRI en 2000, el escándalo conocido como Pemexgate.
Los recursos que recibe el sindicato petrolero habían sido un secreto de Estado debido a que Romero Deschamps se ha opuesto a transparentar el dinero que recibe de Pemex.
El sindicato petrolero ha interpuesto amparos en los juzgados administrativos federales para evitar que la paraestatal entregue información a los ciudadanos que pretenden conocer los montos que les entrega el gobierno.
Luego de un largo litigio ante los tribunales, en la que el juez obligó a la paraestatal a entregar información sobre el dinero público que recibe el sindicato, se conoce de manera oficial los millonarios montos que entrega Pemex al sindicato.
En un documento oficial, elaborado por Alejandro Cabrera Fernández, quien ocupa el cargo de enlace titular de la subdirección Corporativa de Relaciones Laborales ante el Comité de Información de Pemex, se revela por vez primera ese secreto, así sea parcialmente: la suma de las cantidades que el sindicato petrolero recibió entre 2005 y 2007 fue de mil 408 millones de pesos.

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Quién podría decir que 2005 fue un mal año para Carlos Romero Deschamps. Habiendo superado en 2003 la tensión provocada por la petición de la PGR para que le quitaran el fuero como diputado –contó con la colaboración de un juez que lo amparó para que ello no ocurriera–, también llegó a acuerdos sin precedentes con Pemex.
Al margen del dinero que se ha detallado en los párrafos precedentes, Romero Deschamps consiguió de la paraestatal dinero extra en agosto de 2005: mil 724 millones de pesos.
Los conceptos: construcción de viviendas de los trabajadores, mantenimiento de centros deportivos y escuelas en los estados de México, Distrito Federal, Hidalgo, Tamaulipas, Guanajuato, Campeche, Tabasco, Veracruz y Chiapas.

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Carlos Romero Deschamps tenía 20 años de edad cuando conoció de manera personal a Joaquín Hernández Galicia. La Quina era el líder del sindicato petrolero, la organización de trabajadores que empezaba a tomar fuerza con el boom petrolero que se vivía en México.
En 1964, el secretario del Trabajo de la sección sindical de Salamanca, Guanajuato, Víctor
Deschamps, presentó a La Quina a su sobrino Carlos.
La Quina tomó aprecio al joven Deschamps porque era su paisano. Tamaulipeco igual que él. Y Joaquín Hernández Galicia necesitaba allegarse de personas de mucha confianza que fueran leales con su proyecto sindical.
El dirigente petrolero empleó al joven Deschamps como su chofer, pero terminó cargando las maletas y escribiendo los documentos de La Quina.
“Era abonero en Tampico, me lo presentó su primo. Fue mi chofer y me cargaba el portafolio. Me hacía mis escritos y cada rato me llevaba porras a donde quiera, para quedar bien conmigo. Como era de Tamaulipas, le agarramos mucha confianza. Lo llegamos a considerar como de la familia”, recuerda Hernández Galicia con mucha lucidez en entrevista telefónica con emeequis.
El joven Deschamps se ganó la confianza de La Quina, quien lo envió a la sección sindical de la Refinería de Azcapotzalco, en el DF, para sustituir al secretario seccional, Héctor Martínez, porque se emborrachaba un día sí y el otro también.
Fue así como a Romero Deschamps se le abrieron las puertas del Comité Ejecutivo Nacional del Sindicato Petrolero para dejar de ser un simple cargador de maletas.
“Me arrepiento de haberlo apoyado. Escogí al más traidor de todos los líderes. No líder porque ni a eso llega. Me voy arrepentir toda la vida por todas las cochinadas que ha hecho con Salinas, Zedillo, Fox y ahora con Calderón. Ha robado como cinco Pemexgates, ha hecho préstamos al sindicato que luego aparecen como rezagos salariales”, señala el ex líder desde Ciudad Madero.
El 10 de enero de 1989, Joaquín Hernández Galicia, quien tenía 40 años al frente del sindicato petrolero, fue detenido por órdenes del presidente Carlos Salinas de Gortari. Se le “sembraron” cadáveres y un arsenal de armas reservadas al ejército. Y fue detenido y procesado, aunque el dirigente petrolero siempre ha dicho que el fondo del asunto es que Salinas de Gortari lo responsabilizaba de haber apoyado de manera velada la candidatura presidencial de Cuauhtémoc Cárdenas en la elección presidencial.
Al quedar descabezado el sindicato petrolero, Salinas de Gortari allanó el camino para que Sebastián Guzmán Cabrera fuera nombrado secretario general del sindicato y Romero Deschamps secretario del interior.
A sus 86 años, La Quina recuerda esos episodios como si hubieran sido ayer. “Romero Deschamps me vendió con Salinas. Le envió a Salinas un documento con mi firma, que él mismo había escrito, que decía que yo no iba a permitir que se le diera entrada a los empresarios nacionales y extranjeros a Pemex. Que no íbamos a permitir la privatización de nuestro petróleo, que primero levantábamos una huelga antes de permitir su entrada”.
Sebastián Guzmán Cabrera sólo permaneció tres años al frente del sindicato petrolero, falleció por enfermedad, por lo que Romero Deschamps aprovechó para escalar a la secretaría general.
Desde 1993 permanece en el cargo, donde ha sido reelecto en tres ocasiones.
–¿Por qué Pemex protege a Romero Deschamps?
–Hay un contubernio descarado, antipatriótico, totalmente deshonesto. Deschamps está firmando los contratos de riesgo donde Pemex le regala 50 por ciento de las pocas reservas que nos quedan, simulando contratos de riesgo inexistentes. Son un fraude a la nación los contratos de riesgo.
–¿A dónde ha ido a parar todo el dinero que se le da al sindicato?
–A la bolsa de Romero Deschamps. Tiene casas en Cancún, en Estados Unidos, en las Islas Caimán.
La Quina permaneció recluido nueve años en la cárcel y hoy en libertad se recupera de leucemia en su casa de Ciudad Madero, Tamaulipas.
“Nunca robé. Todo lo que compré lo puse a nombre del sindicato. Cuando me agarraron, dejé 126 tiendas, 52 fábricas, 60 mil hectáreas de ganadería fina con cabezas de ganado. Hicimos cientos de escuelas y centros deportivos. Todo se lo robaron. Ahora ya no existe nada de lo que dejamos a nombre del sindicato petrolero. Ahora él es un millonario y yo vivo en la pobreza”.

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El senador panista Juan Bueno Torio califica como un exceso los recursos extraordinarios que entrega Pemex al sindicato de trabajadores petroleros para el pago de viajes, alimentos y fiestas.
“Los recursos que les entregan son legales, están previstos en el contrato colectivo del trabajo. Está firmado. Es un compromiso de Pemex con el sindicato. Pero es un exceso, desde mi punto de vista, para mi todo eso es un exceso que no debería de ser”, dice el legislador veracruzano.
Y algo sabe. Bueno Torio, director general de Pemex-Refinación durante la administración de Vicente Fox, asegura que la paraestatal está obligada a entregar los apoyos extra al sindicato de Carlos Romero Deschamps debido a que son convenios firmados como parte de las negociaciones del contrato colectivo de trabajo.
Los apoyos económicos que recibe el sindicato para pagar viajes, hospedajes, abogados y festejos se establecieron durante los últimos dos años del sexenio foxista.
–El sindicato recibe un promedio de 30 millones de pesos mensuales de cuotas y otras cantidades adicionales…
–También recibe ocho millones de pesos para gastos, tres millones para viáticos y otras cantidades adicionales –responde.
–¿Por qué les pagan los viajes al sindicato?
–Eso había que preguntárselo al director de Pemex. Son temas que están en el contrato colectivo de trabajo. Nuestro objetivo será transparentar la relación de los sindicatos y las empresas públicas. A los trabajadores les corresponde vigilar el destino del dinero que recibe su sindicato, pero muchas veces son comprados, amedrentados y amenazados.
El PAN siempre ha sido respetuoso de la autonomía sindical y la relación de los trabajadores con sus dirigencias. Hemos planteado que se debe fortalecer la vida democrática dentro de los sindicatos, fortalecer la transparencia en el manejo de los recursos de los sindicatos, pero ese es un asunto que corresponde a los sindicalizados.
Y agrega: “Debemos hacer reformas en la Ley Federal del Trabajo para establecer ciertas obligaciones de las dirigencias sindicales en favor de la transparencia y de los propios trabajadores sindicalizados”.
Bueno Torio, quien fue acusado de beneficiar a sus familiares cuando fue director de Pemex Refinación, enumera los puntos que debería tener la reforma laboral para transparentar los recursos que reciben los sindicatos en el país:
• La obligatoriedad de hacer elecciones democráticas con voto secreto.
• Que la rendición de cuentas sea cada tres meses.
• Que se informe sobre el uso y destino de los recursos que reciben.
• Que se divulguen los sueldos de la dirigencia.
• La inversión que hace el sindicato en hospitales o campos deportivos.
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Capítulo aparte merecen los gastos derivados de los 4 mil 580 trabajadores petroleros que se encuentran comisionados al sindicato y que cobran puntualmente su salario en Pemex, al amparo de la cláusula 251 del Contrato Colectivo de Trabajo y el artículo 43 de la Ley Federal de los Trabajadores al Servicio del Estado.
En la última revisión del contrato colectivo, Romero Deschamps negoció mantener las prestaciones para los trabajadores comisionados al sindicato, de los cuales 2 mil 880  corresponden a las 36 secciones sindicales; 400 tienen permisos permanentes y el resto se encuentran dentro del Comité Ejecutivo Nacional.
De acuerdo con la cláusula 245 del Contrato Colectivo de Trabajo, Pemex descuenta a los trabajadores el dos por ciento de su salario para entregarlo al sindicato por concepto de cuotas sindicales.

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El diputado perredista Juan Guerra afirma que directivos de Pemex y la cúpula del sindicato mantienen un contubernio para transferir a sus cuentas bancarias la renta petrolera disfrazada en convenios laborales.
“Las transferencias que realiza Pemex al sindicato son transferencias de corrupción de la renta petrolera. El sindicato ha apoyado la iniciativa privatizadora de Calderón porque lo único que le interesa es mantener la cuota de corrupción”.
El sindicato, dice, tiene derecho de recaudar las cuotas de los trabajadores pero es ilegal que le paguen viajes y comilonas. “Lo que no es legal es que le estén pagando viáticos a la cúpula sindical. Ahora ya sabemos que Pemex pagó ese reciente viaje a Las Vegas. Ese yate que tienen los dirigentes petroleros ya sabemos de dónde salió, son de las transferencias que le hacen al sindicato. También ya sabemos de dónde sale el financiamiento de las campañas del PRI. Todo eso es ilegal. La empresa no tiene porque estar pagando ni viajes a Las Vegas, ni yates, ni comilonas, ni nada”.
–¿Existe contubernio entre funcionarios de Pemex y el sindicato?
–Hay un contubernio de orden económico: el sindicato se ha visto beneficiado con transferencias económicas y la empresa se ve beneficiada teniendo un sindicato a modo y dócil. Y no hay que confundir a los trabajadores del sindicato con toda la cúpula que se beneficia con todas estas transferencias.

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Otro ejemplo de canonjías para los dirigentes del sindicato petrolero. Los altos precios a la gasolina y al gas doméstico no preocupan en nada a la cúpula del sindicato petrolero. Romero Deschamps y sus cercanos colaboradores tienen asegurado el combustible para los vehículos de lujo que utilizan.
La cláusula 182 del contrato colectivo de trabajo establece que los trabajadores sindicalizados tienen derecho al reembolso mensual de 50 por ciento del consumo de mil litros de gasolina y de seis litros de aceite lubricante automotriz.
“Los beneficios de esta cláusula se aplican a los funcionarios y comisionados sindicales, y a los delegados departamentales que utilicen vehículos propiedad del sindicato para el desempeño de sus funciones que tiene encomendadas, sin perjuicio de las normas establecidas en los centros de trabajo”.
Pero si de canonjías que rayan en la ilegalidad se habla, ahí están las que se firmaron en 2004. En julio de ese año Pemex y el sindicato firmaron un convenio de transferencias –al margen de las negociaciones del Contrato Colectivo de Trabajo–.
En el convenio número 10275/04, el entonces director de Pemex, Raúl Muñoz Leos, concertó con Romero Deschamps la entrega de alrededor de 7 mil millones de pesos al sindicato para la construcción de 10 mil viviendas, mantenimiento de centros deportivos y escuelas.
Por la entrega de multimillonarios recursos a Romero Deschamps, la PGR inició una averiguación en contra de Muñoz Leos por el presunto quebranto a Pemex de mil 724 millones de pesos.
Mientras que la Secretaría de la Función Pública impuso a Muñoz Leos una multa por un monto de 872 millones de pesos y una inhabilitación de 10 de años para trabajar en el sector público por considerar que violó la normatividad al entregar recursos al sindicato petrolero sin la autorización del Consejo de Administración de Pemex.
Sin embargo, las autoridades no procedieron en contra de otro ex director de Pemex, Luis Ramírez Corzo, quien firmó otro convenio para finiquitar la entrega de recursos que había prometido Muñoz Leos al sindicato.
Romero Deschamps tiene experiencia en firmar convenios millonarios para favorecer a su sindicato.
Quién no recuerda el Pemexgate. En junio de 2000, el entonces director de Pemex, Rogelio Montemayor, le entregó un préstamo de 1200 millones de pesos al sindicato.
Y tres años después, se descubrió que el líder sindical desvió 500 millones de pesos para la campaña presidencial de Francisco Labastida Ochoa, actual senador de la República, por lo que el IFE impuso al PRI una multa de mil millones de pesos.

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Para el diputado priista Samuel Aguilar los recursos que transfiere Pemex al sindicato se encuentran dentro del marco legal. “No se si Pemex sea benevolente con el sindicato. Mientras la serie de prestaciones que le dan estén dentro del convenio es totalmente legal”.
–El sindicato ha recibido mil 408 millones de pesos en dos años y medio.
–No estamos hablando de los montos sino de lo que es legal.
–¿Y el uso que se le da a estos recursos?
–-Eso corresponde a los trabajadores. Que les rindan cuentas sus dirigentes sindicales.
–¿No es una incongruencia que digan que no existen recursos para modernizar a Pemex y al sindicato se le transfieren recursos millonarios?
–El gobierno nunca ha hablado con la verdad, nunca ha hablado de que hay cerca de 300 mil millones de pesos que son extra al precio del petróleo, y hablamos de una serie de prestaciones que se han ido a todo el abultado personal de confianza que se tiene en la empresa. Lo que tenemos que hacer aquí es una rendición de cuentas generalizada y total. Y si existe transparencia que sea pareja.
Hemos pedido que se transparenten los excedentes de los recursos petroleros porque los números no cuadran. Es un tema de exigencia nacional que se dé un proceso de transparencia en todos los aspectos y no focalizarlo en el sindicato.

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