En una carta, al estilo de los mensajes de superación personal, destinada a elevar la decaída moral, curar las mortales heridas políticas y calmar el malestar de los altos mandos del PAN, por su derrota histórica del pasado 1 de Julio, firmada por el ex diputado federal en cuatro ocasiones, ex Senador de la República, ex consejero jurídico de la Presidencia de la República y ex-Subprocurador de Derechos Humanos de la PGR, Juan de Dios Castro, da a conocer la opinión de un destacado salinista, Francisco Gil Díaz, ex secretario de Hacienda durante el gobierno de Vicente Fox (recuerden su gabinetazo) y actualmente presidente ejecutivo de la empresa Telefónica Española.En la susodicha carta fechada el 27 de julio y publicada por EXCELSIOR el 3 de agosto, Juan de Dios Castro Lozano llamó a los consejeros del PAN a respaldar al presidente Felipe Calderón en sus afanes por transformar al partido, porque es un hombre que tiene huevos y apoya su dicho dando a conocer un episodio que compartió con Gil Díaz:
"Permítame darle a conocer el mensaje que el anterior secretario de Hacienda Francisco Gil Díaz me pidió darle al presidente Calderón y que nunca tuve oportunidad de hacerlo: Juan de Dios, me dijo, cuando veas al presidente Calderón dile que en mi opinión tiene unos huevos de avestruz (sic) porque firmó el decreto que hizo desaparecer al SME (...) El mensaje de Francisco Gil concluía: el proyecto de decreto de referencia lo vi en el escritorio de otros presidentes y ninguno se atrevió a firmarlo por los costos políticos."
Más allá de la demora inexplicable de Juan de Dios, que nunca tuvo la oportunidad de hacerle llegar el comentario de LOS HUEVOS DE CALDERÓN al espurio de Los Pinos, el ex Subprocurador de Derechos Humanos de la PGR y responsable de velar por ellos, concluye calificando a Calderón como "el mejor presidente que ha tenido México"
Bueno, en realidad el nombre del cargo completo del destacado panista Juan de Dios Castro fue el de Subprocurador de Derechos Humanos, Atención a Víctimas y Servicios a la comunidad, cargo público al que llegó en enero de 2007 durante el gobierno de Felipe Calderón Hinojosa. Sus razones tiene entonces para considerarlo "el mejor presidente que ha tenido México". Más aún si consideramos que durante la pesadilla del Calderonato, los muertos ascienden a más de 60 mil como resultado de su insensata "guerra", y de los cuales fue omisa y negligente la Subprocuraduría que encabezó por mandato de Calderón.
La citada carta retrata de cuerpo entero a un sector del alto mando Panista, como son sus consejeros nacionales, cuando los convoca a inhibir las declaraciones a los medios, a lavar la ropa sucia en casa, en suma a autolimitar la libertad de expresión. Cínicos, hipócritas, de doble moral, mentirosos, sería la conclusión correcta frente a la misiva con la que Juan de Dios Castro, intentará convencer a los Consejeros del PAN que el 11 de agosto discutirán si avalan la última jugada de Calderón para controlar al Partido Acción Nacional y de esa manera resguardarse de los golpes políticos, penales, administrativos y de todo tipo que se desatarán en su contra después del 1 de diciembre en que perderá el fuero presidencial y regresará a ser un ciudadano común.
Los huevos de Calderón, si los tiene, o si son de avestruces, como calificó Gil Díaz, alumno predilecto de Pedro Aspe (el de los Mitos Geniales al descalificar la pobreza, el hambre y el desempleo), es lo menos relevante, si consideramos que desde el escritorio de una oficina y con pluma y papel se puede sentenciar y enviar a la muerte a decenas de miles de mexicanos, lo mismo soldados que policías federales, y fundamentalmente mexicanos y mexicanas víctimas inocentes que bien pudieron evitarse con otra estrategia fundada en la inteligencia en el uso de la fuerza pública. Pero sobre todo, reconociendo que la delincuencia organizada y el narcotráfico germinó, creció y floreció en México como resultado de más de 30 años de ese criminal modelo neoliberal impuesto desde afuera y que hoy la oligarquía mexicana y su clase política siguen defendiendo a capa y espada, cuando en sus cunas de origen y a la luz de la crisis económica mundial sus fundamentos están siendo severamente cuestionados.
Los huevos de Calderón que tanto alaba la momia del Pan solo reflejan la cobardía de quién posee una alma perversa y envenenada, incapaz de honrar siquiera a su propia padre, pues honrar una memoria implica un acto de congruencia frente a los principios morales y éticos del viejo Panismo fundado en la lucha por el Bien Común, así haya sido desde una posición conservadora. Los huevos de Calderón que tan bien conoce Juan de Dios Castro, están manchados de sangre, de muerte, de miles de víctimas, de huérfanos, de viudas, de mutilados, de dolor y sufrimiento individual y social que pudo haberse evitado. No fue una acción de "pantalones", sino un acto cobarde de una mente enferma, arropada en el poder y escudada y protegida por el Estado Mayor Presidencial, con un miedo atroz para enfrentar de frente el reclamo y la protesta del Pueblo y sus ciudadanos.
Los huevos de avestruz con los que Juan de Dios y Francisco Gil Díaz pretenden enaltecer la criminal y fascista decisión de Calderón al decretar la inconstitucional e ilegal extinción de Luz y Fuerza del Centro, son de un cinismo cruel y despiadado al reconocer lo que la hipocresía Panista siempre ha negado: "firmó el decreto que hizo desaparecer al SME". Con ello queda al descubierto, una vez más, que no fue como el Decreto "argumenta", por interés público y conveniencia de la economía nacional. NO. Fue para eliminar un obstáculo formidable para hacer avanzar la privatización de la Industria Eléctrica Nacionalizada y la fibra óptica, atrás de la cual están también los intereses de la Telefónica Española que representa Francisco Gil Díaz. El SME, su vida democrática, su historia nacionalista y revolucionaria, su Contrato Colectivo de Trabajo que combate el contratismo y fortalece la materia de trabajo nacionalizada estorbaban para un Negociazo de decenas de miles de millones de dólares para las trasnacionales eléctricas y de telecomunicaciones y la oligarquía mexicana asociada a ella: Iberdrola, Fenosa, Mitsubishi, Televisa, TvAzteca, el Grupo Carso de Slim...la lista no es muy larga y la analizaremos más adelante.
Los huevos de Calderón, son en realidad, los de la Serpiente, que en nuestro Escudo Nacional está siendo devorada por el Águila mexicana. Los de la vieja y nueva oligarquía. Son los huevos de traición de quienes combatieron desde 1810 nuestros sueños de Independencia y Libertad. Los que desde la Guerra de Reforma lucharon en contra de la construcción de un México con Libertad, Justicia y Democracia. Los huevos de Calderón no son siquiera de colibrí, sino de Vende Patrias. De los émulos modernos de Antonio López de Santa Anna que hoy buscan entregar el petróleo y la electricidad al control y propiedad extranjero. De quienes soñaron la restauración de la Monarquía. De quienes siguen pensando que el Ejido y el Reparto de tierras fue una decisión mal tomada. De quienes abominan de la Nacionalización de la Industria del Petróleo en 1938 y la Electricidad en 1960. Los huevos de Calderón son los sueños momificados de quienes pretenden dar vuelta al Reloj de la Historia y que con flores frescas en la tumba de Porfirio Díaz en Montparnasse, rezan por el regreso de la dictadura. Los huevos de Calderón son también de quienes buscan la imposición de Peña Nieto. En resumen los huevos de Calderón de los que se ufana Juan de Dios y un sector del PAN y del PRI no son más que pura mierda histórica, salpicada de sangre, muerte y sufrimiento.
¿El SME..? EL SME SIGUE VIVO. Después de 2 años y 10 meses seguimos vivos y fortalecidos en nuestra dignidad fundada en razones y en principios universales: La dignidad no tiene precio. Se nutre de principios y derechos humanos fundados en la libertad y la justicia. La contraparte de los Huevos de Calderón fue la Derrota histórica que el espurio su PAN y su candidata sufrieron este 1 de julio y fue la factura que les pasó el Pueblo de México por las agravios cometidos en su contra. Y el SME fue y es uno de los factores más importantes en la Derrota de Calderón y su partido. Nuestra heroica lucha rindió así su primer fruto. ¡ Vamos a Ganar! Vamos por el Patrón Sustituto, la Libertad de todos nuestros Presos Políticos, el respeto irrestricto a nuestros derechos como Jubilados del SME. Por una Patria Libre, Justa y Democrática. ¡Aplastemos el huevo de la serpiente!
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