Periódico La Jornada
Martes 24 de diciembre de 2013, p. 29
Sao Paulo, 23 de diciembre.
La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, anunció este lunes que promulgó un decreto que aumenta el salario mínimo para los trabajadores a 724 reales mensuales (306.5 dólares) a partir de enero del próximo año, alza cercana a 7 por ciento.
Firmé el decreto que reajusta ese salario a 724 reales a partir de enero de 2014, 6.78 por ciento sobre el valor actual, aseguró Rousseff en su cuenta de Twitter. Poco antes, en una entrevista radial, se mostró satisfecha con ese aumento y dijo que 2014 será un año mejor para todos, pues se trabaja tras día para mejorar las condiciones de vida de los ciudadanos.
La semana pasada, la presidenta había anticipado que el salario mínimo de 2014 subiría de 678 reales a entre 722 y 724.
La propuesta, enviada por el gobierno al Congreso en agosto pasado, preveía un salario mínimo de 722.90 reales.
El reajuste del salario mínimo se hace con base en una fórmula que toma en cuenta la variación del producto interno bruto (PIB) de los dos años anteriores y la inflación del año previo, medida por el índice nacional de precios al consumidor. El valor final es definido la Presidencia.
Salario mínimo en Brasil es 97.5 por ciento superior al de México
La semana pasada la Comisión Nacional de los Salarios Mínimos aprobó un incremento de 3.9 por ciento, casi la mitad de lo autorizado en Brasil. Así, los trabajadores mexicanos que perciben el sueldo mínimo por sus servicios ganarán sólo 2.46 pesos en 2014.
El salario mínimo en México equivale a 155.5 dólares al mes, mientras en Brasil es de 307.134. Con el aumento autorizado este lunes por Rousseff será 97.5 por ciento mayor al pagado en México, que será de 67.29 pesos diarios (2 mil 18.70 pesos mensuales) en 2014 en la zona geográfica A, que comprende el Distrito Federal y su área metropolitana, entre otras entidades, mientras en la zona B será de 63.77 (mil 913 pesos mensuales), es decir, 147.3 dólares al mes, frente a los 307.1 dólares que perciben los trabajadores brasileños.
En esta área, los trabajadores mexicanos se encuentran en desventaja y la diferencia respecto de la percepción del salario mínimo en Brasil se eleva a 108.4 por ciento.
La Comisión Económica para América Latina señaló que en México el salario mínimo es utilizado para controlar la inflación e impulsar las exportaciones.
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