Martín Esparza: Cruz humana clama por justicia laboral

Benedicto XVI no escuchó a trabajadores
Electricistas acusan a Calderón de usar la religión católica para lavar sus tropelías y hacer proselitismo electoral
Martín Esparza Flores | Secretario General del Sindicato Mexicano de Electricistas y Conductor de frecuencia laboral
En la escenografía y agenda de la vista a México de Benedicto XVI, máximo jerarca de la iglesia católica, por ningún lado aparecieron los representantes de los millones de trabajadores que se han quedado sin empleo, como los mineros, los trabajadores aeronáuticos, los empleados públicos o los electricistas de Luz y Fuerza del Centro, como consecuencia de la ilegal determinación de Calderón de desaparecer sus fuentes de trabajo.
Por esa razón de que los electricistas en resistencia hicimos una cruz humana en el zócalo de la ciudad de México el viernes 23 y sábado 24 de marzo del 2012. La intención fue que Benedicto XVI se entera de que Felipe Calderón, presidente de México y otros gobernantes, que se persignan en sus iglesias y se dan golpe de pecho los domingos, pero de manera autoritaria en la función pública lesionan los derechos humanos laborales sin ningún remordimiento.

La idea es informarle a Benedicto XVI que esa conducta inhumana de los funcionarios públicos del gobierno de Felipe Calderón ha provocado daños a la salud de los trabajadores afectados, incluso han atentado contra su vida y su libertad por reclamar sus derechos humanos laborales.

En el caso del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME) hay 12 compañeros en la cárcel. Miguel Márquez Ríos que lleva un año cinco meses en la cárcel de Puebla, así como otros once compañeros nuestros que están en el reclusorio oriente de la Ciudad de México, sin que hayan cometido ningún delito, sólo por defender el derecho al empleo digno, al salario remunerador, respeto al contrato colectivo y a nuestro sindicato.

La cruz humana que hicimos en el zócalo de la ciudad de México fue un símbolo con el que demostramos que tenemos mucha fe en nuestra lucha por rescatar nuestra fuente de trabajo. Y le pedimos a la iglesia que hiciera un pronunciamiento sobre el tema del trabajo, para que Benedicto XVI en su visita a nuestro país pidiera a los gobernantes buscar cómo resolver el problema del desempleo.

Pero Benedicto VI se fue el lunes 26 de marzo del 2012 como llegó...sin recibir a ninguna víctima de la política antilaboral de Estado que ha implementado el panista presidente mexicano del desempleo Felipe Calderón, quien cerrará su sexenio con más desocupados en el país, más carestía y más pobres.