http://ianrgros.blogspot.com/2009/11/la-voz-de-los-trabajadores-importante.html
Los electricistas del SME tenemos la experiencia resistente de la huelga de 1987, y decenas de luchas libradas por el mejoramiento de nuestras condiciones laborales y salariales, no necesitamos de una asociación paralela al sindicato, aceptarlo equivale a traicionar a nuestro gremio.
LA PROPUESTA DE JORGE SÁNCHEZ GARCÍA ES UNA TRAMPA DISFRAZADA DE SOLUCIÓN.
Los jubilados conquistamos nuestra jubilación a través de la lucha y de los años, siempre apoyándonos en instituciones de la clase obrera, Art. 123 constitucional, Ley Federal del Trabajo, Ley del IMSS. Aceptar una asociación de jubilados reglamentada en el Código Civil (Art. 2670-2687) establecería un antecedente a favor de quienes buscan liquidar por completo los derechos obreros, sería un pretexto más para atomizar a los sindicatos y convertirlos en asociaciones civiles.
Es lo que buscan el gobierno y los industriales; sustituir a la Ley Federal del Trabajo por el Código Civil, bajo el argumento de “liberar la negociación obrero patronal, toda vez que ambas fuerzas celebran un contrato, y este se debe regir por la libre voluntad entre las partes” Esto es lo que quiere Jorge Sánchez, apoyar la política de desregulación laboral como cualquier empresario, a quien le estorban los sindicatos y las leyes obreras para continuar acumulando riqueza.
¡DEJAR DE RESISTIR ES EMPEZAR A MORIR!
RENUNCIAR A LA LUCHA, A LA UNIDAD, Y A LA MOVILIZACIÓN SIGNIFICARÍA ACEPTAR QUE EL GOBIERNO DESTRUYA LA FUERZA LABORAL QUE REPRESENTAMOS, NUESTRA IDENTIDAD SOCIAL Y EL ÚNICO RECURSO DE SUBSISTENCIA DE LOS JUBIOLADOS, LA CATORCENA.
Jorge Sánchez García, ex secretario general del SME propone que abandonemos la lucha, que los despedidos acepten su liquidación y formen grupos de microempresas para prestar trabajo a la empresa que sustituya a LyFC bajo el argumento de que el decreto de extinción es ley y por lo tanto inalterable. Nada más falso, en 1999 los electricistas del SME y de CFE, los maestros, estudiantes y diversas organizaciones que se unieron al sindicato logramos derrotar a Zedillo, que pretendía privatizar a LyFC. No aceptaremos ponernos de rodillas, rechacemos las propuestas de Jorge Sánchez. ¡Sí podemos echar abajo el decreto de extinción de LyFC!
¡HEMOS SIDO GOLPEADOS PERO NO ESTAMOS DERROTADOS!
No estamos solos, enfrentaremos esta agresión con la unidad de las organizaciones que
también están reaccionando por los golpes sufridos. El gobierno de Calderón y su política nos están unificando. Jorge Sánchez García no tiene una sola idea de qué hacer frente al problema, plantea lo mismo que esta tratando de imponer el gobierno, intenta dividir para
simplificarle el trabajo a Calderón. Ha sido un incondicional del sistema corrupto que lo parió y le rinde pleitesía absoluta al gobierno de cualquier color. Para él, igual que para nosotros, todos los gobiernos han sido lo mismo, solo cambian de color y de nombre, mientras que la política de represión, desempleo, austeridad y violencia sigue siendo la misma. Pero existe una diferencia abismal entre un empresario como Jorge Sánchez García y nosotros, lo que a él le beneficia a nosotros nos aniquila. Jorge Sánchez firmó un convenio de productividad con LyFC a espaldas de la base trabajadora (25de febrero de 1993), en donde se establecían condiciones de trabajo contrarias al CCT, además se aceptaba la separación de más de 12 mil trabajadores sindicalizados, y comprometió al gremio a cumplir índices de productividad inalcanzables. Con la unidad y movilización de la base dentro y fuera del sindicato logramos presionar lo suficiente y echamos abajo ese convenio que Jorge Sánchez ofreció como tributo a su compadre Carlos Salinas de Gortari. También intentó reformar los estatutos para permanecer en la dirección por tiempo indefinido, la combatividad de la base evitó que su propuesta pasara. Fue expulsado de la organización, por la asamblea judicial que le comprobó un fraude al programa habitacional por más de 3 mil millones de pesos, el problema lo siguen sufriendo compañeros que adquirieron casa o departamento en los predios que Jorge compró con las cuotas sindicales y se adjudicó. Alguien que actúa en forma contraria a los principios estatutarios de nuestro sindicato no se puede presentar como el salvador de los problemas actuales. La responsabilidad estatutaria de los dirigentes es representar nuestras demandas digna y honestamente, la participación acertada de cualquier dirigente, no es motivo de júbilo o reconocimiento, sólo ha sido su obligación y su trabajo, por el cual esta devengando una remuneración que él mismo se otorga sin más limitante que su conciencia, y si no cuenta con el coraje y la fuerza para representarnos tiene el derecho estatutario de renunciar, y nosotros como base, de enjuiciarlo y fincar responsabilidades por su actuación.
“UNIFIQUEMOS NUESTRAS POSICIONES Y LAS ACCIONES”
RATIFIQUEMOS LA EXPULSIÓN DE JORGE SÁNCHEZ GARCÍA, NO ASISTAS A SUS REUNIONES.
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