Sin tomar parecer de los afectados
La ruta de privatización y aniquilamiento de las pensiones de millones de mexicanos ya alcanzó a los trabajadores burocráticos luego de que legisladores de los consabidos partidos PRI, Verde, PAN, Encuentro Social y Nueva Alianza, aprobaron la desincorporación del Pensionissste para transformar este fondo nacional de pensiones en una empresa pública-privada que podrá manejar a su entera libertad los 120 mil millones de pesos de las 39 mil cuentas que actualmente opera, con la discrecionalidad exclusiva de la Secretaría de Hacienda.
Como viene ocurriendo desde hace años con las Afores, la reforma aprobada en el Congreso sin tomar parecer a los directamente afectados, deslinda al Estado de su responsabilidad para con la seguridad social de los trabajadores a su servicio, los llamados burócratas, y de ribete, permite que los banqueros tengan a su disposición los millonarios recursos de sus pensiones con una participación de arranque, de hasta el 45 por ciento de la supuesta paraestatal.