REDACCIÓN
amNOTA PUBLICADA: 11/17/2010
El esfuerzo de sus amigos no bastó para que Miguel Ángel despertara. Una descarga eléctrica terminó con su vida la tarde de ayer en la subestación de la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
Miguel Ángel Martínez Ávalos, de 43 años de edad, realizaba su trabajo en la subestación de la CFE ubicada en la comunidad Santa Rita, sobre la carretera León–Cuerámaro.
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Sobre la caja de una camioneta que lo transportaba a un hospital, paramédicos de Bomberos intentaron reanimar a Miguel Ángel Martínez Ávalos, de 43 años de edad, sin éxito.
Sobre la caja de una camioneta que lo transportaba a un hospital, paramédicos de Bomberos intentaron reanimar a Miguel Ángel Martínez Ávalos, de 43 años de edad, sin éxito.
Ayer después de las 5 de la tarde, Miguel Ángel recibió una descarga eléctrica cuando se encontraba reparando un transformador. Al parecer, la electricidad entró por sus manos y recorrió su cuerpo provocando que cayera fulminado al piso.
Sus compañeros se percataron del hecho y corrieron.
“Nos dimos cuenta después y le comenzamos a ayudar, le dábamos reanimación y no respondía”, contó sollozando un amigo y compañero de la víctima.
Los trabajadores marcaron a la Cabina de Emergencias (066), para pedir una ambulancia, pero fue tanta su desesperación que mejor optaron por salir de la subestación cargando a Miguel Ángel.
Juan Manuel Elías conducía su camioneta Chevrolet gris cuando le pidieron ayuda.
“Yo iba pasando en mi camioneta y me pidieron que los ayudara porque su amigo se había electrocutado”, contó.
Subieron a Miguel Ángel en la caja de la camioneta; nunca dejaron de reanimarlo, pero no veían que respondiera.
Fue hasta San Cristóbal que la ambulancia ECO-45 de Bomberos alcanzó la camioneta y de inmediato los paramédicos se acercaron a Miguel Ángel.
Pero ya era tarde, después de revisar sus signos vitales y el pulso de su corazón, un rescatista dijo que Miguel Ángel ya había fallecido.
Los trabajadores de la CFE se abrazaron y lloraron la desgracia de su compañero.
Un hermano de Miguel acudió al lugar y se quebrantó al verlo bajo una sábana azul y una chamarra que cubría su rostro.
Elementos de la Policía Municipal de San Francisco del Rincón y Protección Civil de la misma entidad llegaron para acordonar el lugar a la espera del Ministerio Público.
Después de que los peritos recabaron información, el cuerpo de Miguel Ángel fue trasladado al anfiteatro del Servicio Médico Forense (Semefo) para practicarle la necroscopia de ley y determinar las causas del deceso.
