3 mayo 2013
Consuelo Medina
La Prensa
En teoría, la Comisión Federal de Electricidad (CFE) es una "empresa de clase mundial" que presta el servicio de energía eléctrica "con criterios de suficiencia y sustentabilidad", comprometida con la "satisfacción de los clientes, con el desarrollo del país y la preservación del ambiente".
Se oye bien y los ánimos se exaltan al conocer su misión al 2030: "ser una empresa de energía de las mejores en el sector eléctrico a nivel mundial, con presencia internacional, fortaleza financiera e ingresos adicionales por servicios relacionados con su capital intelectual e infraestructura física y comercial.
"Una empresa reconocida por su atención al cliente, competitividad, transparencia, calidad en el servicio, capacidad de su personal, vanguardia tecnológica y aplicación de criterios de desarrollo sustentable".
Pero como la realidad siempre rebasa las buenas intenciones de algunas empresas, vale la pena detenerse en algunos aspectos: "satisfacción de los clientes".
La CFE encabeza -al primer bimestre de 2013- la lista de quejas en la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) por cobros indebidos y negativas a dar soluciones.
Los abusos son por cantidades descomunales impresas en los recibos bimestrales, tanto por consumo como por ajustes. Muchos de los casos son costos que rebasan el salario mensual de los usuarios.
La gente se queja porque con engaños los obligan a sacar los medidores de sus casas y de esa manera cortan con mayor facilidad el servicio a la hora que se les antoje.
La prepotencia de los empleados es también una queja recurrente ante la Profeco. Algunos se preguntan ¿porque se hacen presentes en sus hogares en sábado y sin la vestimenta que los distingue como trabajadores de la CFE?
En una vivienda con dos departamentos y un local, que la lógica matemática indica que son tres medidores igual a tres recibos, a los señores de CFE les falló el cálculo, porque envían cuatro recibos, ¡hasta magos son! Valdría la pena que agregaran este nuevo don a su lista de aspiraciones al 203o.
¿De verdad se consideran de clase mundial?
No hay comentarios :
Publicar un comentario