Acorrala Noroña al "lacayo del poder"

Lilia Arellano - Opinión revista EMET | 20 de Octbre 2011

El ex zedillista, ex priista, y actual panista y calderonista, Javier Lozano Alarcón, titular de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS), se exhibió y demostró una vez más en la Cámara de Diputados que es uno de los peores y más funestos funcionarios federales, culpable de la actual crisis laboral del país; uno de los principales responsables de la precaria situación de la economía, del adverso contexto salarial, de la destrucción de empleos dignos y estables, de la caída del mercado interno, del crecimiento de la economía informal;  golpeador de las organizaciones sindicales, aliado de los esquemas más perversos de corrupción sindical y patronal. Un servidor público arrogante, prepotente, insensible, un “lacayo del poder”, como lo calificó el diputado petista Gerardo Fernández Noroña.

Lozano Alarcón sostuvo este miércoles una tensa reunión de trabajo con motivo de la glosa del quinto informe de gobierno de Felipe Calderón ante las comisiones del Trabajo y Previsión Social y de Seguridad Social de la Cámara baja, en la cual los legisladores le cuestionaron su cinismo y la violación masiva de los derechos laborales en México; le señalaron su fracaso en la generación de empleos, una de las principales promesas de campaña de su jefe; le recriminaron la política laboral “despótica y mentirosa”, y lo acusaron de ser golpeador de sindicatos independientes.

Ante los señalamientos, el nefasto funcionario reventó y les dijo a los diputados que “son buenos para criticar pero malos para legislar”… “¿Para qué me invitan?”, les increpó.  Fernández Noroña reaccionó airadamente contra Lozano, cuando éste cuestionó el trabajo de los legisladores federales, se levantó de su lugar e intentó llegar hasta el funcionario, pero con Arturo Ramírez Bucio y Gerardo de los Cobos al frente, con quien se lió a empujones, los panistas se interpusieron en su camino provocando un desorden: el tono de la discusión subió, el ambiente se acaloró, en medio del cual el también petista Porfirio Muñoz Ledo reclamaba la política laboral calderonista, por lo que el presidente de la Comisión del Trabajo, Tereso Medina, dio por concluida la comparecencia del secretario del Trabajo antes de acabarse las rondas de participación debido al altercado, y tras cuatro horas de haber iniciado.

Lozano no fue a San Lázaro a responder a los cuestionamientos de los legisladores, ni a justificar porque los índices laborales que tiene México “no son suficientes ni satisfactorios”, sus intervenciones se centraron en insistir ante los diputados aprobar la reforma laboral “para mejorar las condiciones de los trabajadores en el país”, en donde reconoció que hay un mercado laboral que no es suficiente, ni satisfactorio. El funcionario justificó que México vive los efectos de una situación económica mundial y ante este panorama adverso, dijo, todos “debemos poner de nuestra parte para mejorar las condiciones de vida y acceso al mercado laboral, niveles de vida e incentivos y ser capaces, frente a otros países del mundo, de generar más empleo y por eso aprobar cuanto antes la reforma laboral”.

Ante la insistencia de Lozano sobre la reforma laboral, Noroña le reclamó que ese tema no era para ser abordado en ese momento, por lo que lo retó a hacerlo en otro formato. El también aspirante a la jefatura de Gobierno del Distrito Federal pidió al funcionario su renuncia, entre otras cosas porque no le importa el sufrimiento de miles de asalariados que viven con 60 pesos diarios, por lo que lo retó a que viva una semana con ese ingreso. Las criticas a Lozano fueron desde la calificación de que “es un lacayo del poder”, hasta las recriminaciones porque no compareció el año pasado, pasando por calificativos como “canalla”, “arrogante”, “insensible”, y las acusaciones de tener a su esposa como “aviadora” en el Consejo Nacional de Fomento Educativo (Conafe), con un sueldo de 50 mil pesos.

Frente a algunos reclamos de diputados panistas y priístas que pedían respeto,  como otro funesto personaje como lo es el dirigente de los ferrocarrileros, Víctor Flores, Fernández Noroña reclamó: “cómo pueden defender a un tipo canalla como el que tenemos enfrente. Miserable. Este tipo no debería estar sentado aquí, ni pisar este suelo porque no tiene el mínimo honor, ni pundonor, ni siquiera hace caso, no tiene el mínimo decoro… Que los diputados del PAN lo defiendan, pero también los del PRI, es el colmo de la desvergüenza. ¿Qué trabajadores representan e intereses? ¿Los que representa Lozano?”.

El perredista Francisco Hernández Juárez también se lanzó contra el titular de la STPS al exponer que el gobierno que representa Lozano Alarcón trata de disfrazar una crisis laboral, pero el tamaño de la realidad supera cualquier fantasía.  El líder de los telefonistas sostuvo que no pasará la propuesta de reforma laboral que pretende por no convenir a los derechos de los trabajadores, que son violados crecientemente en la actualidad. Al referirse a dicha reforma, señaló que “nada exhibe mejor la falsedad democrática del gobierno que representa, así como los impedimentos para formar sindicatos autónomos y democráticos sin presiones o injerencia o amenazas de la autoridad laboral”. Asimismo, Laura Arizmendi, del partido Convergencia, hoy Movimiento Ciudadano, le indicó la serie de dificultades que no ha podido superar el sector laboral y subrayó que México ha enfrentado un largo proceso de crisis, con grave dependencia económica, desempleo, crecimiento de economía informal, caída del mercado interno y de los salarios.

Cabe destacar que al iniciar la comparecencia, a petición de Fernández Noroña, se guardó un minuto de silencio en memoria del piloto de Mexicana de Aviación –empresa que en agosto del año pasado cerró operaciones y se quedaron sin trabajo cerca de ocho mil personas- Alejandro López Ibáñez, quien se quitó la vida el martes dejando una carta póstuma explicando que lo hizo “tras más de un año sin obtener empleo y sin que la reestructura de la aerolínea se diera, decidió suicidarse”. Sobre el particular, la empresa Mexicana de Aviación, Lozano planteó que tenía buenas noticias y señaló que de nueva cuenta la aerolínea está por reiniciar operaciones, porque el grupo español, Med Atlántica, del inversionista Christian Cadenas, está por inyectar en los próximos días 250 millones de dólares a la aerolínea a través de un fideicomiso de la firma Tenedora K, con lo que se contempla la reestructura de la misma. No obstante, el funcionario dijo “hasta no ve no creer”.  Será la próxima semana cuando se defina la posible compra con ese grupo.

Por su parte, Mexicana de Aviación informó que había concluido la transferencia de acciones de Nuevo Grupo Aeronáutico, entidad poseedora de Mexicana de Aviación, Mexicana Click, Mexicana Link, Mexicana MRO Services, entre otras, en poder de Tenedora K, a un fideicomiso creado en CI Banco con el propósito de avanzar en el proceso de reestructura y capitalización de la empresa. “Lo anterior, como resultado de las negociaciones llevadas a cabo entre Tenedora K y el grupo de inversionistas de Med Atlántica encabezadas por el señor Christian Cadenas”.

En tanto, mientras comparecía Lozano Alarcón en San Lázaro, familiares de los 65 mineros fallecidos en la mina de carbón en Pasta de Conchos, Coahuila, se encontraban apostados en las calles de Moliere y Campos Eliseos, en la colonia Polanco de la Ciudad de México, ante oficinas ejecutivas de Grupo México, la más grande compañía minera del país, reclamando que a la fecha, después de más de cinco años de la tragedia, no habían recibido ni un solo peso de indemnización. Lozano, como se recordará, hizo un gran trabajo defendiendo los intereses económicos de Grupo México.

La injusticia con los mineros fallecidos en México contrasta con lo que ayer le referimos en estas mismas líneas en el sentido de que una corte estadounidense ordenó a Grupo México pagar a su subsidiaria peruana Sohthern Copper (SC) un millón 263 mil dólares, por su papel en la adquisición de Minera México en 2004. La corte de Delaware encontró que la transacción fue injusta y ordenó a Grupo México regresar esa cantidad. En cambio, en México ninguna autoridad ha obligado a Grupo México resarcir la pérdida de los jefes de 65 familias fallecidos en la mina de la región de Nueva Rosita.