** Construirá 4 ductos en 3 años: Ruiz Sacristán
** Todo listo para proyecto eólico en Baja California
La transnacional Sempra invertirá en los próximos tres años mil 500 millones de dólares en proyectos energéticos en México que le permitirán diversificar su posición en el mercado mexicano, contribuir al desarrollo de energías renovables y ampliar el abasto de gas natural.
El presidente y director de Sempra México, Carlos Ruiz Sacristán, sostuvo en entrevista que la empresa superó el problema que enfrentó con personas que pretendían extorsionar y difamar a la compañía y ahora está en plena fase de crecimiento como una compañía más integral y menos dependiente de Sempra Energy, su matriz en Estados Unidos.
Detalló que en los próximos tres años la empresa ejecutará la construcción de cuatro tramos de ductos para el transporte de gas natural y etano de PEMEX y la CFE, entre los que destaca el primer tramo de la red Los Ramones, que aliviará los problemas de abasto en el occidente del país; y una planta de almacenamiento de gas LP en Jalisco.
Por otra parte, rechazó que la planta de regasificación de gas natural que opera en Ensenada, Baja California, represente pérdidas ahora que los precios del combustible están deprimidos.
El ejecutivo precisó que a mediados de este año comenzará la construcción de un parque de energía eólica en La Rumorosa, Baja California, con capacidad para producir 156 megawatts (Mw) que exportarán a California, Estados Unidos.
El proyecto requerirá una inversión de 300 millones de dólares e iniciará operaciones en 2014 en cinco mil hectáreas de terrenos privados y ejidales que arrendó.
La empresa evalúa ampliar el proyecto eólico para abastecer energía en México, pero por lo pronto la primera fase será sólo para llevarla al país del norte, mediante un contrato por 20 años que firmó con la subsidiaria de Sempra Energy, San Diego Gas & Electric.
El ejecutivo que asumió la presidencia de Sempra México en junio del año pasado, indicó que, a la par, iniciarán la construcción de los ductos de transporte de gas natural Sásabe-Guaymas y El Encino-Topolobampo en Sonora y Sinaloa, con una longitud global de 820 kilómetros que licitó el año pasado la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
De acuerdo con las bases de licitación de la CFE, 50 por ciento del contenido debe ser nacional, por lo que Sempra contrató el acero con las mexicanas Procarsa y Tubacero; el resto con la extranjera Stop.
Su filial En Zapopan, Jalisco, Sempra, por medio de Gasoductos de Chihuahua (en la que participa como socio a partes iguales con PEMEX Gas y Petroquímica Básica), construye una planta de almacenamiento de gas licuado de petróleo, ya que la actual opera en la zona metropolitana de Guadalajara.
También mediante Gasoductos de Chihuahua construye un ducto de 220 kilómetros que partirá de Tabasco hasta Nanchital, Veracruz, para que PGPB pueda abastecer etano al complejo petroquímico Etileno XXI que lleva a cabo el consorcio Braskem-Idesa.
El ducto que moverá la materia prima a Etileno XXI, desde Tabasco pasando por los complejos de PGPB Nuevo PEMEX, Ciudad PEMEX Cactus y Cangrejera, requerirá una inversión de 275 millones de dólares y el ducto tendrá tramos con diámetros de 24 y 16 pulgadas.
De manera adicional, está en marcha el proyecto para construir la primera fase del ducto Los Ramones, que permitirá llevar gas natural del punto de interconexión con Estados Unidos en la frontera norte de Tamaulipas hasta San Luís Potosí y Querétaro.
La primera parte de este ducto será la obra de transporte de gas natural más emblemática de los últimos años y consta de 115 kilómetros.
Ese tramo permitirá resolver el cuello de botella que representa la importación del hidrocarburo procedente de Estados Unidos. Destacó el ejecutivo de la compañía que al concluir las redes de ductos se convertirá en la segunda administradora más importante de redes de transporte de gas natural en México, después de PGPB.
De la planta regasificadora de Ensenada en la que Shell y Gazprom tienen el 50 por ciento de la capacidad contratada, señaló que esas empresas pagan a Sempra por la capacidad reservada, la utilicen o no.
Ante la caída en el precio del gas natural en Estados Unidos, la importación de gas natural licuado ha dejado de ser una opción rentable, por lo que Shell y Gazprom utilizan al mínimo la capacidad adquirida.
CFE, el principal usuario de la central regasificadora, mantiene un contrato que lo obliga a utilizar una capacidad mínima de 40 millones de pies cúbicos de gas natural al día y un máximo de 280 millones. El consumo promedio es de entre 90 y 140 millones de pies cúbicos.
Ruiz Sacristán aseguró que la terminal regasificadora de gas natural licuado de importación es un negocio rentable para la empresa, pero admitió que una opción sería reconvertir la central en una licuefacción para exportar el combustible.
Sin embargo, esa posibilidad depende de las condiciones futuras del mercado, pues un proyecto de ese alcance requiere una inversión superior a seis mil millones de dólares. |
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