El académico Gustavo Leal Fernández señaló que es “una coartada” para justificar el aumento del IVA, cuyos recursos financiarán las pérdidas por la reforma petrolera.
31 julio 2013
Elizabeth Velasco C.
México, DF. El Sistema de Seguridad Universal que propone Enrique Peña Nieto no es más que una “coartada” para justificar la reforma fiscal que elevaría en 16 por ciento el IVA a alimentos y medicinas, advirtió el académico de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), Gustavo Leal Fernández, quien subrayó que dicho esquema significa un retroceso en lo relativo a la pensión, el seguro temporal de desempleo y en el acceso a la salud.
En entrevista con La Jornada, luego de dictar una conferencia ante jubilados del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME), señaló que son los jóvenes quienes pagarían la más alta factura, porque dicho sistema representa una reducción absoluta de las prestaciones sociales.
“Los más afectados, por la reforma laboral que votó Peña Nieto, serán los jóvenes que hoy día tienen nuevos términos de contratación sin ninguna garantía, y con esta oferta del seguro universal que se firma con la OIT se les deja un piso de protección social mínima: apenas recibirán tres meses de salario (dos mil pesos al mes), en caso de despido, y la atención en el IMSS; eso no es un seguro de desempleo”.
De acuerdo con información gubernamental obtenida por el investigador, dicho sistema tendría un costo fiscal de 66 mil 400 millones de pesos (incluido el seguro para jefas de familia cuyo valor asciende a 400 millones de pesos) que ya está presupuestado.
Y el dinero obtenido por el aumento al IVA, “servirá para financiar el hoyo que dejará la eventual aprobación de la reforma petrolera, como lo anunció Peña Nieto al Financial Times”.
El colaborador de este diario cuestionó que del fondo asignado al IMSS, Issste y Seguro Popular para la operación del sistema, se tenga planeado tomar recursos para el sector privado.
“La secretaria de Salud, Mercedes Juan -quien brincó al gabinete desde la Fundación Mexicana para la Salud, grupo de interés financiado por Nestlé, creadora de productos obesigénicos- es una promotora abierta de esta universalidad que viene del diseño del Seguro Popular de Julio Frenk y Guillermo Soberón. Y este fondo único para la convergencia y portabilidad en materia de salud, involucra al sector privado en la prestación de servicios”.
Todo ese entramado, dijo, no se ha discutido con suficiencia ante la ciudadanía, ni el “moche” que de los presupuestos públicos representaría la participación privada, en deterioro del IMSS e Issste, de cuyo mejoramiento no se ha hablado. Lo más extraño, dijo, es que la UNT y la CMT hayan firmado un pronunciamiento en donde avalan dicho sistema.
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